Tras dos días en la Toscana pusimos rumbo a Croacia. Nuestra primera parada fue la isla de Hvar. Esta isla es conocida como la "Ibiza del Adriático" por su ambiente de marcha y lujo y por la planta de Lavanda. Esta planta crece por todo Hvar, por lo que es habitual comprar en cualquiera de sus pueblos productos hecho con ella: miel, aceite ..etc
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| David a punto de coger el ferry de Ancona a Hvar |
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| Rosa, Mario y David en la plaza de la Iglesia de Hvar |
El ferry nos llevó desde Ancona a Stari Grad y desde allí fuimos al pueblo de Hvar, que es donde teníamos el apartamento. Durante los días de estancia fuimos a visitar Jelsa, un pueblecito precioso que se encuentra en el norte de la isla y Stari Grad, donde nos comimos los sabrosos mejillones al vapor.
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| Mario y David en el apartamento. Al fondo las islas Pakleni |
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| Jugando en un parque acuático de Jelsa |
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| Paseando por Jelsa |
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| A punto de cenar en un típico restaurante de Stari Grad |
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| Mario y David en el paseo de la costa de Hvar |
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| Puerto de Hvar |
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| La famila Álvarez-Ramos al completo |
Otra cosa imprescindible a visitar son las islas Pakleni, situadas muy cerca del pueblo de Hvar. A ellas se puede llegar dos maneras: alquilando un bote o cogiendo un transporte que te lleva y trae de vuelta. Estos últimos son muy abundantes en el puerto de Hvar. Nosotros fuimos al islote de Jerolim, altamente recomendable por sus calas naturistas y ambiente relajado.
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| Rosa, Mario y David en Jerolim. Islas Pakleni |
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| David echando una siesta en uno de los locales de la isla |
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| Entrada a la playa naturista de Jerolim |
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| Mario y David jugando en el agua |
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| David descansando tras un baño |
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| Mario antes del baño |
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| Tomando una cerveza en el bar del bosque de Jerolim |
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| Rosa, Mario y David en el castillo de Hvar |
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